Descubre paso a paso el desarrollo de tu bebé.
La mayoría de las embarazadas presenta malestar, nauseas y/o vómitos, a predominio matutino. El útero y tus senos comienzan a cambiar, pero tú todavía no te das cuenta. Como tampoco te has dado cuenta que tú bebe comenzó desde la unión de 2 células hasta formar el embrión, la placenta y el cordón. Así, como se van formando el resto de sus órganos internos. De acuerdo con la fecha de tu última regla, cuando ya tienes unas 2 semanas de retraso, es decir, con 6 semanas de embarazo, por ultrasonido transvaginal tú obstetra ya podrá visualizar el embrión de unos 5 mm y su corazón latiendo. Debes alimentarte balanceadamente (granos, cereales, frutas, vegetales, proteínas, pescado y leche). Evita el fumar, tomar alcohol, drogas, la cafeína, los rayos x, el sedentarismo y, nunca tomes medicinas sin el consentimiento de tu obstetra. Habla con tu pareja, compartan sus sentimientos y decidan cuando y como darle al resto de la familia la gran noticia. En caso de que no sea tu primer hijo, planifica como compartir esta con tus otros hijos. En general, mientras mas rápido lo hagas, mayor confianza tendrá. Intenta captar su atención, si puedes, llévalo a las consultas prenatales. Cuéntale historias sobre su nuevo hermanito y trata que participe en cierta toma de decisiones como el nombre, su cuarto y su cuna. Enséñale fotos de cuando el nació, así sabrá que el fue un bebe también. Ejercítate con regularidad. Las caminatas son un excelente ejercicio. Sin embargo, también necesitas descansar mucho. Durante el embarazo es normal que los futuros padres tengan diferentes sentimientos, puede que algunos días estén felices con la idea de un nuevo bebe, pero en otros quizás les parezca que la idea ya no es tan encantadora. A veces las dudas pueden convertirse en preocupaciones, Lo importante es darse apoyo mutuamente y vivir esta experiencia maravillosa.
Tú bebe crece dentro de ti. Sus extremidades y órganos se están desarrollando, al igual que se desarrolla la placenta. Tu cuerpo presenta cambios físicos, hormonales y metabólicos. Quizás las nauseas matutinas sean mas frecuentes y, además podrías tener ciertos cólicos, similares a los que tienes cuando te viene la menstruación. Estos cólicos son debidos al aumento del volumen del útero, y no deberás angustiarte, siempre y cuando no sean muy fuertes y no estén asociados a sangramiento vía vaginal. Tus senos se agrandan y sensibilizan. Debes mantener tu control prenatal y asistir todos los meses. Tendrás que realizarte una rutina prenatal de exámenes de laboratorio. Debes consultar todas tus dudas con tu obstetra, en cuanto a cambios de tu cuerpo, desarrollo y bienestar del bebe, exámenes a realizar, medicamentos que puedes o no tomar, si te ejercitas o no, acerca del trabajo y tu alimentación. La buena alimentación es fundamental, es decir, la calidad y no la cantidad. Merienda comidas nutritivas como frutas, yogurt o cereales. Si estabas de muy bajo peso antes de salir embarazada o llevas más de un bebe en la barriga, quizás se pueda permitir un mayor aumento de peso. No obstante, si estabas de sobrepeso o con obesidad previa, el aumento de peso debe ser menor. Como regla general, se acepta una ganancia de un kilo por mes, lo que finalizaría un incremento de alrededor de 9 a 14 kilos. Si vas a viajar, debes evitar estar sentada mucho tiempo, así que una parada para caminar es lo recomendado. Si el viaje es en avión, llama al consultorio para darte algunas recomendaciones especiales, así como en caso de viaje a la playa o a la piscina. Descansa a menudo, ejercítate con regularidad siguiendo las indicaciones de tu obstetra. Trata de llevar tu vida de una manera inteligente y tranquila, recuerda que vas a ser mamá.
Comienzas a sentirte mejor. Las nauseas se distancian, tendiendo a desaparecer. El útero esta aumentando de tamaño y puede que lo notes mas pronunciado, tanto que probablemente empuja tu vejiga obligándote a orinar con mas frecuencia. Puede que sientas que te falta energía para cumplir con tu rutina diaria o, inclusive, cansada sin razón. Esto es normal, debido al aumento de tu metabolismo lo cual incrementa tu gasto calórico. Tus senos crecen y la areola y pezones comienzan a oscurecerse. El flujo es normal que aumente, pero nunca debe ser excesivo, picar o tener mal olor, de lo contrario, consulta con tu obstetra. Tu bebe ya tiene todos los órganos formados y muchos ya están funcionando. Por ejemplo, sus riñones producen orina, sus manitas forman un pequeño puño, su boca se abre y se cierra, da pataditas y mueve su cabeza. Todavía los genitales están en formación, por lo que hay que esperar todavía para saber si es niño o niña. Recuerda mantener una nutrición adecuada y balanceada. No olvides comer proteínas, frutas, granos y vegetales regularmente. Debes tomar mucho agua (8 a 12 vasos al día). Usa cremas para mantener hidratada tu piel. Los ejercicios no pueden faltar (nadar, bicicleta estacionaria, caminar o yoga). No fumes y evita que lo hagan cerca de ti. No tomes bebidas alcohólicas (no existe una cantidad segura). El café es preferible descafeinado o suave solamente 1 taza al día. Mantén tu control prenatal mensual para tener mayor seguridad que todo vaya bien y el bebe se desarrolle sano. Tus necesidades nutricionales deben ser suplementadas con vitaminas, minerales, hierro, calcio y ácido fólico. Recuerda preparar tu consulta previamente, donde podré resolver todas las dudas que puedas tener.
Acabas de completar el primer trimestre del embarazo. Si pudieses cargar a tu bebe, este cabria en la palma de tu mano. Ya esta formado completamente, así que a partir de ahora solo le falta madurar y crecer. Los genitales están prácticamente definidos. El recibe sangre, nutrientes y oxigeno a través del cordón umbilical. Se encuentra rodeado de líquido amniótico. Tu bebe se mueve, aunque todavía no es lo suficientemente fuerte para que lo sientas. Tu bebe ya es todo un gimnasta, flexiona sus manos y piernas y se mantiene en movimiento. Espero que tú también hagas lo mismo. El ejercicio te hará sentir mejor y mas saludable. El embarazo no es razón para no ejercitarte, siempre y cuando no existan contraindicaciones por enfermedad de la madre o por riesgo obstétrico. En general, la bicicleta estacionaria, nadar, yoga y caminar se pueden practicar regularmente. Si es al aire libre, usa protector solar y siempre mantente bien hidratada. La prudencia y el sentido común son imprescindibles en el embarazo a la hora de realizar otro tipo de ejercicios para evitar caídas y traumas obstétricos innecesarios, como puede ocurrir en caso de patinar o ejercicios de alto impacto. Si tienes dudas, pregúntale a tu obstetra en el consultorio, o vía telefónica en horario de oficina, sobre todo en caso de que no suelas ejercitarte regularmente fuera del embarazo. En general, las mujeres que se ejercitan durante el embarazo tienen menos riesgo de tener bebes prematuros o problemas de la presión arterial, controlan mejor el sobrepeso y sufren menos dolores de espalda, entre otras razones. Cuida tu espalda, evita agacharte y doblar la espalda para recoger algo del piso; más bien, dobla tus rodillas manteniendo la espalda recta. Utiliza zapatos cómodos sin tacón. Cuando te levantes de la cama ponte de lado y utiliza las manos para cambiar a la posición sentada y luego levántate. Si estas en el suelo, usa las manos para pasar a la posición sentada, arrodillada y finalmente usa las piernas para pararte, manteniendo la espalda recta. Mientras estés parada, has conciencia de mantener la espalda recta con los hombros relajados. Si tienes varices o estás mucho tiempo de pie, utiliza medias para varices (de descanso), y procura periodos de reposo frecuentes con los pies en alto. Al mirarte en el espejo debes lucir como una mujer embarazada. Habitualmente debe haberse acabado los malestares de los primeros meses, así como la falta de energía que sentiste el mes pasado. Recuerda mantener tu dieta balanceada. Trata siempre de comer mejor y no de más. Lo indicado son las carnes y pescados (siempre bien cocidos), así como frutas y vegetales. Limita el consumo de tortas, caramelos, refrescos, galletas y crucherías. A estas alturas, la ropa te debe quedar ajustada. Es importante que uses ropa holgada. Es algo común que sufras de mareos cuando te levantas de la cama o de una silla. Si tienes ropa ajustada, pueden presentarse más a menudo. Si te ocurre, no te preocupes, es producto de una disminución fisiológica de la presión arterial durante el embarazo; por tanto, inmediatamente vuelve a sentarte o acuéstate para evitar una caída y tomate un jugo natural o una bebida dulce. Comparte esta hermosa experiencia con tu pareja, tus familiares y amistades.
Los movimientos de tu bebe comienzan a ser lo suficientemente fuertes como para que los sientas, lo cual parece inicialmente como burbujas en tu estomago que van de un lado a otro. Su cuerpo se empieza a cubrir con un pelo muy fino y le empieza a salir su cabello. Su piel se cubre con una capa grasosa que lo protegerá de su constante exposición con el líquido amniótico. El bebe duerme y se despierta con cierta regularidad. En sus momentos de vigilia es muy activo y lo demuestra estirando sus brazos y piernas, así como dando vueltas. Internamente ya esta todo formado, madurando y creciendo cada órgano y comenzando a incrementar el deposito de minerales en sus huesos como el calcio que los hace mas fuertes. También comienzan a formarse sus uñas. Sus ojos permanecen cerrados. Hacia las 22 semanas el bebe pesa alrededor de 500 gramos. En este lapso comienza a alcanzar buena madurez su sistema auditivo, así que puedes comenzar a estimularlo con música. Recuerda que lo aconsejable es la música clásica. A partir de ahora es que comienza realmente el aumento de peso de aproximadamente de un kilo por mes. Estas también en la segunda mitad del embarazo. Ya debes estar más acostumbrada a los cambios físicos y emocionales del embarazo. Recuerda que el ejercicio, el descanso, la alimentación de calidad y llevar las cosas con calma son la clave para un final feliz. En esta etapa tu cabello se vuelve más grueso y quizás más grasoso. Es muy raro sentir nauseas a esta edad gestacional. Utiliza regularmente una crema para hidratar tu piel para evitar o minimizar las posibles estrías. Se aconseja recurrir a sostenes de mayor talla que te hagan sentir cómoda. En esta fase a veces se siente un dolor en el bajo vientre de moderada intensidad que puede preocupar mucho en ocasiones, causado por tracción de cierto ligamento que sostiene al útero. No dudes en comunicarte al consultorio en caso de molestias o preocupación. Mantén tu control prenatal, los suplementos de vitaminas y minerales, así como una dieta balanceada, sobre todo de calidad sin sobrepasar las 2000 Kcal. Mantente bien hidratada con 8 a 12 vasos de agua al día. Cuando desees un postre, es preferible siempre las comidas nutritivas como las frutas que las chucherías.
Hacia las 27 semanas el bebe pesa alrededor de 1 kilo. Las pataditas del bebe son diarias, ya se chupa su dedito y abre y cierra los ojos. Sus huesos ya están mas duros y sus pulmones se preparan para al alcanzar la madurez necesaria para respirar después del nacimiento. Las frecuentes ganas de orinar tienden a aliviarse. Puede que experimentes dolores repentinos en el vientre causados por el crecimiento continuo del útero. Evita los movimientos bruscos para disminuir tu malestar. Trata siempre de alimentarte correctamente y no saltarte las comidas. Ten siempre presente que el desarrollo adecuado de tu bebe depende de tu buena alimentación. Si tienes muchas tareas o trabajo, trata siempre de llevarlo correctamente. Por encima de todo, tu objetivo principal debe ser el garantizarte un embarazo sin preocupaciones. Nunca dejes de alimentarte saludablemente, pese a que estés muy complicada. Recuerda los alimentos que debes comer: ensaladas, lácteos, frutas, vegetales, legumbres, carne, pescado y pollo. Los alimentos restringidos son: enlatados, pescado crudo, harinas, dulces, gaseosas, pastas, café, sal y especias. Los hábitos recomendados: nadar, bailar, amar, descansar, caminar y hacer ejercicio. Los hábitos prohibidos son: gula, alcohol, falta de descanso, aplicación de insecticidas, venenos o pinturas y, especialmente, fumar. Si requieres la toma de un medicamento siempre llama al consultorio para que estés segura cual es mejor y más seguro para tomar durante el embarazo.
Estas empezando el último trimestre. En caso de emergencia, si el bebe naciera en este tiempo sus probabilidades de vida son altas; no obstante, sus órganos aun no están maduros. El objetivo de este trimestre es precisamente alcanzar el grado de madurez necesaria, especialmente de los pulmones, cerebro e hígado. Controla tus ansias por el nacimiento de tu bebe porque el aun tiene muchas cosas por hacer dentro de tu útero. Debido a que es el momento de mayor riesgo, las consultas cada vez se harán más seguidas. Ya debes estar más familiarizada con el ultrasonido. La piel de tu bebe es rojiza. Los latidos de su corazón a veces pueden ser escuchados por su papá si coloca sus oídos sobre tu barriga. Si el bebe es un varón, sus testículos comienzan a descender desde el lugar donde se desarrollan en el abdomen hasta su escroto, para formar sus bolitas. Sus movimientos son más fuertes y vigorosos. El bebe responde a la luz y ha creado el habito de dormir y despertarse. Antes de acostarte a dormir, háblale y dale las buenas noches. En esta etapa, aumenta alrededor de 150-200 gramos semanales. Es muy importante que reconozcas el patrón de movimientos de tu bebe (cantidad, calidad y horarios de máxima actividad). Esto te ayudara a saber que el bebe esta bien, entre una consulta y otra. En cuanto a ti, lo siento, pero debe haber regresado la fatiga del primer trimestre y quizás sufras de insomnio y calorones. Además, los tobillos pueden hincharse, sobre todo cuando estas mucho tiempo de pie. El edema de los pies en el embarazo es normal siempre y cuando se reduzca cuando descansas con los pies elevados. La recomendación sobre una ropa y calzado cómodos y no ajustados reviste mayor importancia ahora. Las ansias y preocupaciones sobre el nacimiento del bebe aumentan gradualmente se acerca el momento. Debes tener miedo por si nace antes de tiempo o si aun no has arreglado todo lo necesario. Tranquila, estas emociones son normales. Mantén la buena alimentación y el ejercicio sujeto a lo indicado en consulta. No olvides tener todos los arreglos financieros listos, especialmente en lo que refiere a tu seguro y la clínica. Puedes aprovechar para conocer la clínica y saber el recorrido para cuando llegue el día del nacimiento. Las dificultades para respirar mientras estés acostada pueden aminorarse durmiendo de lado, mejor del izquierdo. Esta postura es la que menos afecta a la circulación sanguínea y reduce la mayoría de las molestias nocturnas. Trata de dormir, previamente toma un buen baño o realiza una caminata antes de dormir. Usa un ventilador o aire acondicionado para ayudarte a dormir.
Debes tener la impresión de que no cabe dentro de ti pero sigue creciendo. Tu bebe está lo suficiente maduro como para sobrevivir fuera del útero, ya que la mayoría de sus órganos están bien desarrollados, pero sus pulmones todavía les falta un poco. Adicionalmente, es importante el paso de anticuerpos que lo inmunizaran y protegerán de muchas infecciones. El puede ver (puedes estimularlo con una linterna), oír (escucha sonidos fuera de tu cuerpo), y moverse (juega con el empujándolo suavemente para que te responda con sus pataditas). Debe medir alrededor de 45 cm y pesar unos 2500 gramos. En cuanto a ti, debes estar orinando todo el tiempo porque la cabeza del bebe presiona tu vejiga. Para colmo, sientes que te quedas sin aliento debido a que el fondo del útero presiona tu diafragma. Los calorones son rutina, las secreciones vaginales pueden haber aumentado (pero si son muy abundantes, dan picazón o mal olor, comunícalo en tus consultas), y te cansas muy rápido. Mantén la alimentación balanceada, comiendo en pequeñas pero frecuentes cantidades de comida. En general, la recomendación dada en consulta sobre tres comidas y 2 pequeñas meriendas. Continúa con una buena hidratación (8 a 12 vasos de agua diarios), no olvides usar la crema hidratante para tu piel, no dejes de ejercitarte y encuentra tiempo para hacer las cosas que te gustan hacer. En caso de necesitarlo, con 34 semanas puedes iniciar el reposo prenatal. Falta ya muy poco…
Al fin llego el último mes del embarazo. Ya debes estar casi lista para cuando llegue el nacimiento, además de muy cansada. Las consultas ahora se hacen semanales. Mantente en contacto con tu esposo y familiares, para estar preparada en caso de emergencia, como el inicio de contracciones o la ruptura de las membranas y salida del líquido amniótico. Ten listo el maletín con tus cosas y las del bebe que llevaras a la clínica. Permanece tranquila y serena que tu bebe lo necesita. En lo posible, limita tus viajes a áreas cercanas a tu vivienda. Puede que sientas que el cansancio viene más rápido, tu abdomen esta mucho más grande. Es impresionante ver como se deforma por los movimientos del bebe. El bebe te presiona la pelvis y causa dolor a nivel del pubis. Conforme el bebe toma su posición y baja en el canal para nacer, aumenta tus ganas para orinar al presionarte mas la vejiga, aunque a la vez sientes menos problemas para respirar bien; no obstante, se que igual es difícil. Quizás tengas también tus manos un poco hinchadas y sudorosas. Es muy importante reconocer las falsas alarmas en este momento. Ocurren con frecuencia contracciones irregulares que se presentan con dolor, pero no significan que llego el momento. Estas contracciones se reconocen porque son muy distanciadas, o desaparecen cuando caminas, descansas, cambias de posición o tomas la buscapina® o el sarifan® sólo o el compositum. Si el bebe se mueve mucho, en ocasiones causa dolor también. Ante cualquier duda, sigue las instrucciones dadas en el consultorio o llámame. Recuerda que las verdaderas contracciones son regulares en el tiempo y se hacen cada vez mas frecuentes, inicialmente son una a dos cada diez minutos. Estas continúan aunque te muevas y aumentan cuando caminas. Se sienten al frente y se asocian con dolor en la espalda. Tendrás que realizarte una actualización de los exámenes de laboratorio. Si es tu primer embarazo y deseas parir, lo indicado es realizar una radiocefalopelvimetria hacia las 38 semanas para ver la relación entre la cabeza del bebe y tu pelvis, para evaluar la posibilidad del parto vía vaginal. Mantén tu control semanal, pero en caso de que no sientas al bebe de la manera acostumbrada y diaria, rompas fuentes, tengas contracciones o sangramiento, llámame inmediatamente. Recuerda mi primer correo, siempre estaré dispuesto para aclarar cualquier duda y guiarlos. Por cierto, aun no hemos hablado de tu bebe, el verdadero protagonista de toda esta aventura. El continua creciendo, sus pulmones ya esta maduros. Sus huesos están bien llenos de calcio, pero los huesos de su cabecita permanecen flexibles para el nacimiento. Sus uñas son largas. Probablemente lo sientas mas tranquilo que antes. Esto es debido a que ya esta en posición para nacer y el espacio para moverse es muy reducido. Debe estar midiendo alrededor de 50 cm y pesar 3 kilos. No obstante, con el ultrasonido tendrás el peso estimado de tu bebe en la consulta. Allá o en la clínica nos vemos…